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El Ministerio de Hacienda ha procedido a la adquisición de vehículos destinados al uso ministerial tras ocho largos años de restricciones presupuestarias que habían limitado severamente la renovación de su flotilla vehicular.
Los costos de los nuevos vehículos adquiridos son significativos, ascendiendo a 34,6 millones de colones por uno de ellos y 19,7 millones de colones por el segundo. Estos montos reflejan la inversión sustancial requerida para la modernización y mejora de los recursos vehiculares ministeriales.
Mientras que el Directorio Legislativo ha decidido adquirir una nueva flotilla de vehículos. Los vehículos actualmente en uso, que tienen siete años de antigüedad, serán entregados como parte del plan, y estos han sido evaluados en un monto de 261 millones de colones. Para completar la compra de los nuevos vehículos, se destinarán adicionales 161 millones del presupuesto legislativo, alcanzando un total de 422 millones de colones.
Esta decisión de renovar la flotilla vehicular responde a la necesidad de actualizar los medios de transporte que ya llevan casi una década en funcionamiento.
Los documentos oficiales revelan que ha habido varias modificaciones en el presupuesto a lo largo de los últimos meses. A partir de febrero y continuando hasta mayo, se observó un incremento gradual en el monto asignado al transporte.
Originalmente, el presupuesto incluía 119 millones para equipo de transporte, pero posteriormente se ajustó a 125 millones y luego a 161 millones. Estos cambios presupuestarios demuestran una planificación y reajuste progresivo enfocado en la renovación de la flota vehicular.
El comunicado oficial no especifica quiénes serán los destinatarios de los nuevos vehículos. Este detalle ha generado cierta expectación sobre cómo se utilizarán los recursos públicos en la renovación vehicular y qué otras prioridades presupuestarias podrían verse afectadas por estos gastos significativos.
En resumen, la necesidad de renovar la flota vehicular del Directorio Legislativo, respaldada por el hecho de que los vehículos actuales han estado en uso durante siete años, ha llevado a la asignación de un total de 422 millones de colones para la adquisición de nuevos vehículos.
El proceso de adquisición de estos vehículos se ha llevado a cabo mediante el Sistema de Compras Públicas (SICOP), asegurando transparencia y eficiencia en la gestión de recursos públicos.
