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La investigación del OIJ y la Policía Federal Australiana reveló una estructura criminal que usaba exportaciones legales como fachada para traficar droga
Agentes de la Sección de Estupefacientes del OIJ desarticularon una organización dedicada al tráfico internacional de droga, cuya operación cruzó el océano hasta llegar a Oceanía.
La investigación, que comenzó hace dos años, se desarrolló en conjunto con la Policía Federal Australiana, tras el decomiso de un cargamento de 32 kilos de cocaína en ese país, que provenía de Costa Rica.
“Ese cargamento, por sí solo, tenía un valor estimado de 9.6 millones de dólares en Australia”, explicó Michael Soto, exministro de Seguridad y vocero del OIJ para este caso.
A raíz de esa alerta internacional, las autoridades costarricenses comenzaron una investigación sigilosa que culminó este miércoles 18 de junio de 2025 con seis allanamientos en distintas provincias del país.
Ocultaban la droga en baterías y botes
Los agentes lograron incautar 24 kilos de cocaína que serían exportados ocultos dentro de baterías para montacargas.
Según Soto, en otra oportunidad, la misma organización había usado botes inflables y esculturas como camuflaje.
La droga estaba destinada tanto a Australia como a Estados Unidos, donde el kilo puede alcanzar un valor aproximado de 30 mil dólares.
La red operaba con personas sin antecedentes penales, lo cual dificultaba el rastreo de sus movimientos.
“Es una estructura muy bien organizada, con contactos para obtener la cocaína y medios logísticos para moverla sin levantar sospechas”, detalló Soto.
Allanamientos en seis cantones del país
Los allanamientos se realizaron en sectores como Mata Redonda (San José), Pozos de Santa Ana, La Unión (Cartago), San Isidro del General (Pérez Zeledón) y Puente Salas (Barva de Heredia)
En estos operativos, el OIJ logró detener a seis personas, quienes fueron puestas a la orden del Ministerio Público.
Entre los detenidos figura un hombre de apellido Jiménez, de 49 años, identificado como el presunto líder de la estructura criminal.
También fueron arrestados otros cinco sospechosos cuyas edades oscilan entre los 28 y 68 años.
Según el OIJ, aunque se trata de una organización “pequeña”, su operación es preocupante por el nivel de sofisticación y la ruta que utilizaban.
“El país se ha convertido en un hub logístico para el narcotráfico y por eso la cooperación internacional es vital”, concluyó Soto en un comunicado.
