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Una nueva campaña impulsada en Costa Rica busca educar a los padres sobre la manera adecuada de introducir la alimentación complementaria en bebés de entre 6 y 12 meses. Esta medida es clave para reducir el riesgo de enfermedades crónicas en la infancia, según ha destacado la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
La CCSS recomienda que los sólidos se introduzcan a partir de los 6 meses de vida, combinados con la lactancia materna, y que los alimentos ofrecidos sean variados, naturales y no contengan sal o azúcar añadidos. Esta fase es crucial para el desarrollo saludable del bebé y puede influir en su bienestar a largo plazo.
En 2023, la CCSS atendió 19,299 casos de obesidad en niños menores de nueve años, una cifra alarmante que ha generado la necesidad de reforzar las políticas de prevención desde los primeros meses de vida. La campaña también se enfocará en concientizar a las familias sobre los riesgos de una alimentación inadecuada y la importancia de crear hábitos saludables desde la infancia.