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El Presidente de la República de Costa Rica ha firmado un decreto que permite a los miembros de la Fuerza Pública y la Unidad Especial de Intervención utilizar armas automáticas en su lucha contra la delincuencia. Esta decisión se toma en un contexto de creciente preocupación por la seguridad pública, agravada por un reciente incidente en Batán, Limón, donde delincuentes dispararon en 16 ocasiones contra una patrulla con un arma automática.
Las autoridades han argumentado que la utilización de armas automáticas es una respuesta necesaria ante el incremento de la violencia y los delitos que afectan a la población costarricense. El Presidente enfatizó que la protección de los ciudadanos es la prioridad y que se deben tomar medidas contundentes para garantizar su seguridad.
La firma del decreto se da en un momento en que el Gobierno enfrenta presión para abordar la creciente ola de criminalidad en el país. Con este nuevo enfoque, las autoridades esperan reducir la incidencia del crimen y mejorar la percepción de seguridad entre los ciudadanos.