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Más de 300 mil personas mayores en el país no cuentan con una pensión contributiva básica, lo que resulta en una situación precaria para ellos. Los hombres pueden acceder a esta pensión a partir de los 65 años siempre y cuando hayan cumplido con 300 cuotas, mientras que las mujeres deben esperar hasta los 63 años y cumplir con 405 cuotas.
No obstante, esta pensión no siempre es suficiente para cubrir las necesidades básicas de los jubilados.
Un preocupante 39% de los adultos mayores en el país no cuenta con ningún tipo de pensión, lo que agrava su situación económica.
Entre los comentarios de los propios adultos mayores, se destaca la insuficiencia de las pensiones, que muchas veces no alcanzan para cubrir los gastos básicos como alimentos, vivienda y medicinas, lo cual lleva a algunos a considerar buscar trabajos adicionales para subsistir.
Además de la escasez de pensiones, Costa Rica enfrenta otros problemas como la ayuda que reciben de sus familiares, que no siempre es constante o suficiente, y la burocracia en el sistema de pensiones, que dificulta aún más el acceso a estos recursos.
La insuficiencia de las pensiones para adultos mayores es un tema crítico, reflejado en experiencias personales y comentarios directos que demuestran la gravedad de la situación. Esta precariedad económica empuja a muchos a buscar trabajos adicionales para poder cubrir sus necesidades básicas.
