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En las últimas horas, se han reportado varios casos de menores en riesgo en diferentes zonas de Guanacaste, específicamente en Liberia y Nandayure, así como un caso adicional en Heredia. Estos incidentes han encendido las alarmas de las autoridades y la población.
En Nandayure, un bebé de aproximadamente un año sufrió graves quemaduras con agua hirviendo y fue trasladado en condición crítica al hospital de Nicoya. La Cruz Roja atendió la emergencia y recuerda a la población la importancia de llamar al 911 en situaciones similares.
Otro caso impactante ocurrió en Barrio Nazaret de Liberia, donde se encontró a un bebé recién nacido abandonado dentro de un bolso. Además, en Barrio Daniel Uduber, paramédicos abordaron a una menor de solo 15 días de nacida, quien lamentablemente ya no presentaba signos de vida. El caso está bajo investigación de las autoridades judiciales.
El teniente Marlon Soto, de la Cruz Roja, confirmó que la menor presentaba algunas lesiones, aunque aún no se puede determinar la causa exacta de su muerte. La autopsia será clave para esclarecer los hechos.
El Patronato Nacional de la Infancia (PANI) enfatizó la importancia de brindar apoyo a madres en crisis para evitar situaciones extremas como el abandono infantil. Según expertos, muchas de estas mujeres enfrentan condiciones económicas y emocionales difíciles.
A nivel legal, el Código Penal establece sanciones para quienes abandonen a menores, incluyendo la pérdida de la patria potestad y penas de prisión. Además, si el abandono resulta en la muerte del menor, las consecuencias legales pueden ser aún más severas.
Con estos incidentes, el mes de febrero cierra con un panorama alarmante en cuanto a la seguridad infantil en Guanacaste y otras regiones del país. Las autoridades continúan con las investigaciones para determinar responsabilidades y prevenir futuros casos.
