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El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Heredia realizó un allanamiento el pasado 8 de febrero en un bar cercano al centro de la ciudad, tras la desaparición de dos primos, de 32 y 33 años, reportada el 6 de febrero. Durante la investigación, se confirmó que ambos ingresaron al bar y nunca salieron.
En el sótano del establecimiento, los agentes encontraron dos cuerpos enterrados a una profundidad de 1.60 metros. Las víctimas, de apellido Barboza, presentaban signos de violencia, incluyendo golpes y posibles heridas de arma blanca.
Las autoridades detuvieron a cuatro sospechosos durante el operativo: un hombre de apellido Guzmán (22 años), una mujer de apellido Gutiérrez (26 años), y dos hombres de apellidos Palacios (19 años) y Bonilla (23 años).
La principal hipótesis del OIJ apunta a un altercado violento que escaló, reflejando la creciente preocupación por la falta de tolerancia y la violencia en situaciones cotidianas.
El director general del OIJ, Randall Zúñiga, expresó su compromiso de esclarecer completamente este caso y hacer justicia para las víctimas y sus familias.
