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Un impresionante diamante de 2.492 quilates ha sido hallado en Botswana, convirtiéndose en el segundo más grande jamás descubierto en una mina. Este hallazgo marca el primer gran descubrimiento de este tipo en más de un siglo, superado solo por el famoso diamante Cullinan de 3.106 quilates, encontrado en 1905. El Cullinan fue posteriormente tallado en gemas que hoy adornan las Joyas de la Corona Británica.
El diamante recientemente descubierto ha captado la atención mundial debido a su tamaño excepcional y la rareza de su aparición. Los expertos consideran que este tipo de diamantes son formaciones raras que surgen de condiciones geológicas únicas y que su valor en el mercado puede ser astronómico. Además, este hallazgo refuerza el estatus de Botswana como un importante productor de diamantes y destaca el avance en las técnicas de minería y exploración en la región.