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En el IMAS renovamos nuestro compromiso con Guanacaste en el Bicentenario de la Anexión
Esta semana celebramos la valentía de un pueblo que decidió formar parte de esta patria. Hace ya 200 años, las comunidades que pertenecían al Partido de Nicoya hicieron oficial su deseo de pertenecer a Costa Rica, un hito que no necesitó de la sangre de ningún ser humano, tan solo la herramienta democrática que siempre nos ha caracterizado: el voto.
Con esta conmemoración a las puertas, es de gran importancia para mí destacar la labor del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) en la región Chorotega. En esta administración, el IMAS ha vuelto a llevar su compromiso al campo tras décadas de trabajar solamente tras los escritorios. En este nuevo modelo, hemos vuelto a brindar apoyo directo a quienes más lo necesitan.
Llegamos con la misión de conocer de cerca los proyectos productivos que el IMAS ha impulsado en la región, como parte de la meta institucional de darle a las personas las herramientas para salir de su condición de pobreza.
Nuestra primera parada fue en la ciudad de Liberia, donde visitamos los emprendimientos de José Carlos, quien ha convertido su pasión por la comida en una realidad económica con su negocio «Springfield»; y Hillary, que ha establecido «Costuras Hilldez» como su medio de sostenibilidad a través de la costura y confección de prendas.
También conocimos casos de personas beneficiarias del programa de Mejoramiento de Vivienda. Ver cómo su hogar ha sido transformado en un espacio cómodo gracias al apoyo del IMAS, nos llenó de satisfacción y renovó nuestro compromiso de seguir ayudando a quienes más lo necesitan.
Nos reunimos en Carrillo con gobiernos locales. Estos espacios nos permiten resolver directamente en el territorio los problemas de los cantones.
En el gran día del bicentenario de la Anexión del Partido de Nicoya, participamos en la sesión del Consejo de Gobierno celebrado en el Parque de Nicoya. Este evento cumbre fue un recordatorio de nuestra rica historia y del compromiso continuo de nuestro país con el progreso y el desarrollo inclusivo.
Con creciente satisfacción visitamos distintos hogares y proyectos productivos, hemos sido testigos de primera mano de la eficacia de nuestros programas para mejorar la calidad de vida de las personas que aprovechan las oportunidades que el Estado les brinda. ¡Esos son los verdaderos casos IMAS, los resultados que nuestro país merece!
No tenemos dudas de que el camino que hemos recorrido es el correcto y que seguimos construyendo oportunidades. La inversión en proyectos productivos y el apoyo a los emprendedores locales son vitales para honrar el legado de quienes, hace 200 años, dieron un voto de confianza.
De la Patria por nuestra voluntad fue el lema que definió el deseo de los habitantes de Nicoya de unirse a Costa Rica. Hoy, esa misma voluntad se manifiesta en el esfuerzo conjunto por llevar desarrollo y prosperidad a cada rincón del país.
El IMAS, con su labor incansable en las zonas rurales, es un baluarte de esa idiosincrasia: Juntos, por nuestra propia voluntad, continuamos construyendo un país más justo y próspero para todos y todas.
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