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En un emotivo acto celebrado bajo el cielo infinito de Costa Rica, el presidente rindió homenaje a los héroes nacionales, Juan Rafael Mora Porras y José María Cañas, quienes dieron su vida por la libertad del país. En el marco de este evento, el mandatario destacó la valentía y el sacrificio de estos héroes, recordando que su legado debe ser una guía para enfrentar los desafíos actuales de la nación.
Durante su discurso, el presidente hizo un paralelismo entre las batallas libradas en el pasado, como las de Santa Rosa y Rivas, y las luchas contemporáneas que enfrenta el país, como los reclamos de justicia de los territorios indígenas y la necesidad de mejorar las condiciones de las escuelas rurales. Asimismo, subrayó la importancia de la unidad y el compromiso para superar las dificultades que aquejan al pueblo costarricense.
El mandatario también aprovechó la ocasión para enviar un mensaje claro a aquellos que, según él, han intentado perpetuar sus privilegios a expensas del bienestar del país. Señaló que estas personas, pocas en número, han utilizado las instituciones y el sistema de justicia para mantener su estatus, pero que el pueblo costarricense está cansado de esta situación y no permitirá que continúe.
Además, el presidente reafirmó su compromiso con los valores de libertad, justicia y bien común, instando a los costarricenses a seguir luchando por los ideales que Mora y Cañas defendieron con sus vidas. «No podemos dejar que la memoria de estos héroes sea solo un eco lejano atrapado en una fecha», expresó el presidente, llamando a la ciudadanía a honrar su legado con acciones concretas.
El evento concluyó con la entrega de ofrendas ante los monumentos de los héroes nacionales, un gesto simbólico que refuerza la importancia de recordar el sacrificio de aquellos que defendieron la patria. El presidente cerró su intervención agradeciendo al pueblo costarricense por mantenerse firme en la lucha por los ideales que estos héroes defendieron.
