En un contexto global donde la mayoría de los países enfrentan incrementos en las tarifas eléctricas, Costa Rica se destaca por una reducción significativa en sus costos de electricidad. Marco Acuña, presidente del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), anunció una disminución del 12.6% en el último año. Esta reducción es atribuida al modelo de generación eléctrica renovable del país, que ha logrado una cobertura eléctrica del 99% y produce el 99% de su energía a partir de fuentes renovables, posicionando a Costa Rica como líder mundial en este sector.
A pesar de las críticas de la OCDE sobre el desempeño del ICE, calificándolo como «mediocre» y sugiriendo tarifas más altas en comparación con otros países, datos recientes contradicen estas afirmaciones. Costa Rica mantiene tarifas eléctricas entre las más bajas de Centroamérica y la OCDE, destacándose además por su estabilidad en la calificación de riesgo y ausencia de solicitudes de aumentos tarifarios en 2023. Este logro es especialmente notable dada la actual alza global en tasas de interés e inflación.
Sin embargo, el ICE enfrenta desafíos internos y externos. Por un lado, se critica la gestión de Acuña por presuntos intereses de privatización y cambios en la planificación eléctrica. Por otro lado, la seguridad energética del país se ve amenazada por la implementación de la regla fiscal que limita la inversión del ICE. A pesar de esto, el ICE continúa siendo un pionero en tecnologías de telecomunicaciones y ha ampliado su cobertura a zonas rurales e indígenas.
